Es un nuevo proyecto de Cadem, pensado en convertirse en la principal fuente de consulta en Chile sobre los chilenos. Con ella queremos ir más allá del dato, dándole sentido y relato al cambio del país, ayudando a nuestros clientes a respaldar sus decisiones.
IR A INSIGHT CHILE.CLPlataforma para responder encuestas que reúne a más de 400 mil personas en todo Chile, quienes entregan su opinión sobre diversos temas como política, consumo, marcas, gustos, preferencias o estilos de vida.
IR A CADEMONLINE.CL26 Agosto 2025
Psicóloga de profesión, la presidenta de la encuestadora Cadem, Karen Thal, viene desde el estallido social indagando el estado de ánimo de la sociedad chilena a partir de décadas de experiencia en investigaciones de opinión pública.
Cadem realiza todas las semanas estudios cualitativos —a partir de focus group— para determinar cómo se siente la gente. El humor social, cuenta, ha ido cambiando desde el optimismo que había con la apertura de los procesos constituyentes en 2020. Hoy, a las muchas demandas sociales que siguen vigentes, se suman una crisis de seguridad y un contexto económico complejo.
“Cuando comenzó el camino constituyente la gente tenía mucha esperanza. Ahí parte todo. La gente lo apoyó y tuvo mucha esperanza de que Chile iba a ser un mejor país después de la crisis. Y bueno, tuvimos un primer proceso fallido, un segundo proceso fallido, los que fueron como unas cachetadas a esa esperanza. Y eso fue doloroso para la gente”, explica.
Chile está “deprimido”, dice Thal, recalcando que buena parte de la solución depende de la clase política.
-¿Qué dice la gente en los focus group?
-El estado de ánimo actual de la gente, y por eso quería remontarme al pasado, es uno donde se perdió la esperanza. Hoy Chile está deprimido. Está deprimido y no ve futuro. Hace poquito hicimos unos focus group donde fuimos a buscar el “sueño país”. Hemos consensuado que a Chile le falta esa mirada futura que nos convoque a todos. Partimos preguntándole a las personas cómo sería Chile transformado en una persona, es una técnica proyectiva simple. Y la verdad es que fue muy triste. La gente nos decía: “Si Chile fuera una persona sería como de 40 años, desaseada, que no sabe para dónde va, que un día quiere una cosa, otro día otra, que vive con los papás porque no le alcanza para llegar a fin de mes. Que toma antidepresivos porque no ve futuro”. Una mirada bien triste de cómo Chile se ve así mismo.