Es un nuevo proyecto de Cadem, pensado en convertirse en la principal fuente de consulta en Chile sobre los chilenos. Con ella queremos ir más allá del dato, dándole sentido y relato al cambio del país, ayudando a nuestros clientes a respaldar sus decisiones.
IR A INSIGHT CHILE.CLPlataforma para responder encuestas que reúne a más de 400 mil personas en todo Chile, quienes entregan su opinión sobre diversos temas como política, consumo, marcas, gustos, preferencias o estilos de vida.
IR A CADEMONLINE.CL22 Junio 2022
Solo un 11% de los encuestados en la última encuesta Plaza Pública de Cadem son partidarios de que se apruebe la nueva Constitución tal como lo propone el borrador de la Convención Constitucional, mientras que un 65% es partidario de Aprobar o Rechazar, para luego reformar o escribir una nueva carta fundamental (35% los primeros y 30% los segundos). Solo un 18% prefiere Rechazar para seguir con el texto vigente.
Así lo detalló la medición realizada de manera telefónica entre el miércoles 15 y el viernes 17 de junio, que mostró –al preguntar intención de voto- que el Rechazo supera por 9 puntos al Apruebo (subió 3 puntos respecto de la última medición, llegando a 46%, mientras la idea de Aprobar cayó a 37%, 2 puntos menos que la versión anterior).
“Para el plebiscito del 4 de septiembre uno puede identificar cuatro ejes que van a marcar el resultado”, advierte Roberto Izikson, gerente de Cadem.
Y explica. El primero son los índices de esperanza versus temor/incertidumbre. Según la encuesta, a un 36% la propuesta de la nueva Constitución le genera sentimientos de “esperanza” y un 58% de “preocupación/temor”.
“Esta va a ser una elección de esperanza versus temor/incertidumbre. Hoy aparece más preocupación y temor que esperanza. De hecho, entre los indecisos, al 55% les genera preocupación y temor. Desde esa mirada, el Rechazo tiene un punto ahí a su favor”, sostiene.
El segundo elemento, dice, es la tensión entre el Apruebo para Reformar y Rechazo para una nueva Constitución. “Es interesante que solo uno de cada 10 chilenos quiera aprobar la propuesta tal como está, porque el doble de ese grupo quiere rechazarla para mantener la actual Constitución. Si uno quisiera recomponer el 80% original del Apruebo del plebiscito de entrada, lo encuentra entre los que quieren aprobar para reformar y los que quieren rechazar para hacer una nueva Constitución. Este eje ya está instalado y va a seguir en tensión hasta muy cerca del plebiscito”, sostiene Izikson.